danza tántrica
de regreso al movimiento esencial
Este es un encuentro para que experimentes de forma 100% vivencial a través de danza, respiración y movimiento consciente la práctica del Tantra.
No hace falta que sepas bailar ni meditar.
Formato del curso:
- Encuentro grabado de 1 hora junto al creador de la formación de Guías de Meditaciones Tántricas: Eduardo Socolovsky.
Es recomendable que los participantes cuenten con buen sonido.
El Tantra te invita a ser total, y este taller es para experimentar la totalidad a través del cuerpo y que vivas el silencio que encontramos luego de movernos: la meditación.
Ir de la totalidad al vacío y del vacío a la totalidad, es la polaridad que experimentamos a través de la danza tántrica y la meditación.
Todo el material de la formación quedará disponible durante 1 año luego de tu compra.
GUIA
“¿Qué diferencia el Tantra de otras terapias?”
El Tantra no es una terapia, aunque para ofrecerlo en nuestra cultura, en nuestro sistema, le necesitemos dar un formato de terapia.
De entrada, casi todas las terapias parten de la base de que uno no está bien, de que hay algo que necesita ser arreglado y la terapia es el arreglo. Hay un diagnóstico para ver cuál es el problema y hay implicado de alguna manera un juicio de que algo no está bien.
Según el Tantra, este mismo juicio empeora el problema. Entonces es un camino totalmente contrario. Partimos de la base de no juzgar y de aceptar. Se diferencia de casi todas las religiones también, que parten de la base de que hay algo malo en el ser humano y tiene que corregirlo y comportarse. El Tantra simplemente te invita a estar presente, a aceptarte como sos.
Una de las cosas que más suele decir la gente que se siente inspirada por las actividades de Tantra y que de alguna manera pudo crecer y expandirse, es que en el Tantra no necesariamente tenés que ponerte a contar tus problemas. Muchas veces, como decía Einstein, no podés solucionar un problema desde el mismo plano o nivel de consciencia que lo generó.
El problema es la mente y, si tratamos de solucionarlo desde la mente, no es posible. Por eso en el Tantra, trabajamos con el cuerpo, con la sexualidad, con la respiración. Es una vía directa en la que no interviene demasiado la mente. Simplemente le damos el lugar que le corresponde. La mente es donde se implantan todos los programas, todos los condicionamientos que llevan a la enfermedad.
Entonces, la diferencia más grande del Tantra con otras terapias es que va directamente al núcleo. Sea cual sea el problema, no tenemos la necesidad de estudiar o clasificar diferentes tipos de “problemas” mentales o emocionales de la gente como sucede, por ejemplo, en la medicina occidental que tiene listados de enfermedades y van descubriendo enfermedades nuevas. En la filosofía oriental no existe eso, siempre buscamos ir a la esencia. Entonces, sea cual sea la manifestación de ese desequilibrio siempre hacemos el mismo trabajo. En el caso del Ayurveda, equilibrar los doshas, en el caso del Tantra, ir al corazón. De la mente al corazón. De la coraza a la vulnerabilidad.
Eduardo Socolovsky