Cuando la masculinidad condiciona a la sexualidad
No recuerdo el momento exacto en que lo aprendí: la sexualidad de los hombres cisgénero* es simple. La creencia, muy propia de la heteronorma, va así: los hombres pensamos en sexo todo el tiempo, queremos sexo todo el tiempo, somos capaces de tener sexo todo el tiempo. Y como así de simple es nuestra psicología, también lo es nuestro performance: queremos meterla, sacarla, venirnos, dormir. Repite esta fórmula cada segundo o tercer día y tendrás a un hombre feliz. Y de eso se trata la sexualidad masculina. Las emociones no importan, no nos afectan. Todo es fácil y efectivo, como tenemos que ser los hombres.